jueves, 31 de marzo de 2016

¿Cómo usar el timbre de tu bici?

Hola ciclistas! Tras el parón de las vacaciones, volvemos a la carga, en esta ocasión para reflexionar sobre el uso que hacemos del timbre de nuestras bicicletas. En muchos países, como es el caso español, que tu bici tenga timbre es obligatorio. Recuérdalo al circular, ya que la policía puede llamarte la atención e incluso multarte. Cuando compres una bici sin timbre, que no todas lo llevan incluído, recuerda ponerle uno. Los tienes desde un euro, no te cuesta nada y aumentará tu seguridad a la hora de circular.

Imagen vía curiosite.es


Pero realmente, ¿para qué sirve el timbre de la bicicleta? ¿Es útil en todo momento y situación? ¿Debemos confiar en él nuestra seguridad? ¿Es siempre legítimo su uso? En el tiempo que llevo circulando por Madrid he ido acumulando algunas reflexiones sobre este necesario accesorio de la bici. Pero también he visto hacer mal uso de el.

Cuando NO debe usarse o no es útil el timbre:

- Para avisar a vehículos grandes de tu presencia en sus laterales o trasera. He visto a ciclistas utilizar el timbre para "dialogar" con autobuses, en plan "eh, estoy aquí, no me arrolles", mientras no respetaban ningún tipo de medida de seguridad o distancia respecto a los mismos. A ver, si el conductor no te ve por el retrovisor, no puedes confiar en que oiga tu débil timbre por su ventana cerrada y eso te salve de un "coletazo" lateral. Con los vehículos grandes, situáte a la distancia de seguridad recomendada, verifica sus intermitentes para ver hacia dónde se dirige (o si conoces el bus, mira su número de línea), hazte visible en los retrovisores, establece contacto visual con el conductor, sitúate siempre que puedas en su línea de visión, lateral o situándote delante, e indica tu intención de movimiento con el brazo o la mano. Los conductores de bus poco a poco se van acostumbrando a nosotros y agradecen las facilidades. Cuidado con furgonetas, camiones, hormigoneras, camiones de la basura, grúas, etc. Toma distancia y no te fíes de tu timbre.

- Para espantar peatones en los pasos de cebra y semáforos. Esto lo he visto también en Madrid. Cuando te aproximes a un paso de cebra, y haya peatones dispuestos a cruzar la calzada por la que tú circulas, no les timbres, ya que ellos tienen preferencia de paso. Eres tú el que debe detener la bici y cederles el paso, o disminuir la velocidad para pasar por detrás de ellos, lentamente. En los semáforos en rojo para tí, sólo faltaba que timbrases a los peatones que están cruzando para pasar tú. Y cuando tengas la luz en ámbar pero los peatones tengan el muñequito verde, recuerda que tienen prioridad de paso: no les timbres, que están en su derecho de cruzar.

- Jamás uses el timbre para hacerte oír en cedas el paso o cruces con poca visibilidad, esperando que los vehículos con prioridad de paso se detengan al oír tu débil timbre de bicicleta. Esto lo he visto hacer en muchas ocasiones, y la verdad, es simplemente jugarse la vida. Usa el freno y haz un ceda o un stop como está mandando, con confirmación visual.

- Por supuesto, usar el timbre cuando circulas en contrasentido por un carril bici de una sola dirección, es de bastante mala educación. Dicho queda. Ya que vas contradirección, ten la decencia de ser amable y apartarte un poco para que los que circulan bien no sufran molestias.

- Parecerá un obviedad, pero no tienes ningún derecho a usar el timbre circulando por la acera, para que los peatones se aparten a tu paso. Parece de risa pero a mí como peatona me han timbrado bicicletas por la acera. Con un par.

- Usar el timbre para protestar por cosas que te hayan hecho otros vehículos es ridículo. No eres un coche, de nada te vale pitar. Además, nadie te va a escuchar, más que los peatones. Desahoga tu cabreo con algún taco o "señales visuales" y en paz.

Cuándo SÍ es útil y necesario usar el timbre:

- Para avisar a algún compañero ciclista de tu intención de adelantarle en un paso estrecho. Esto evitará que en el momento en el que coincidáis en paralelo él haga alguna maniobra que pueda ocasionar choque o roce. También puede apartarse para dejarte más espacio. Ten la prudencia de no timbrar demasiado ya que podrías parecer agresivo. Un timbrecito es suficiente.

- Cuando vas a pasar un semáforo que tu tienes en verde pero por el que ya no están pasando coches, en caso de que veas a peatones con intenciones de cruzar en rojo. Muchos no te oyen, ya que no suenas como un coche, y no te ven, ya que están pensando en las musarañas o mirando su móvil. Timbra un poco para que te vean y no crucen en rojo cuando tú, un vehículo, te estás aproximando.

- Cuando vas circulando y ves a un peatón, que no te ha visto, con intenciones de cruzar por un lugar sin paso de cebra ni semáforo. Un timbre a tiempo te evitará un buen susto. Presta atención a peatones que puedan surgir para cruzar detrás de vehículos de gran altura estacionados, a estos de costará verlos aparecer.

- Puedes usar el timbre en cruces con poca visibilidad en parques y similares, en los que no haya señalización de tráfico alguna. Acompaña el uso del timbre con una disminución de la velocidad. El objetivo es no chocar con otra bici a gran velocidad. Pero no tomes el uso del timbre como la adquisión de un derecho de paso.

- Para saludar a un compi ciclista que está cerca pero no te ha visto :-) O a peatones amigos y familiares, que también pasa.

¿Se os ocurre algún uso más? ¿Algo que compartir?
Espero que os haya gustado! Nos vemos pronto, pero a partir de ahora cada dos semanas!

jueves, 10 de marzo de 2016

¿Bicicletas blancas en Madrid?

Ha ocurrido lo que parecía que nunca ocurriría en Madrid. Periódicamente nos enterábamos de que ocurría en otras ciudades, en otros países, en nuestras carreteras. Pero parecía que la ciudad de Madrid, o mejor dicho sus ciclistas, eran invulnerables, inmunes al tráfico, o que todo era bastante seguro y tranquilo, suficientemente pacificado, suficientemente confiable. Aún no teníamos bicicletas blancas, y quizá nunca las tengamos.

Via BikesDF en Pinterest

Desgraciadamente ha ocurrido, y los que vamos en bicicleta por Madrid nos llenamos de tristeza. Tanto como cuando escuchamos que ocurre en otra ciudad, en otro país, en una carretera cualquiera. Hace meses leí una noticia escalofriante, que nos llegaba desde Colombia. Una joven mujer ciclista moría atropellada por un autobús. Justo antes de ser mortalmente arrollada le dio tiempo a sacar a su hijito de la sillita portabebés, y lanzarlo lejos. Se me helaba la sangre en las venas sólo de pensarlo, pensar en esa madre, sentirme cerca suyo. En las últimas semanas todos hemos firmado la petición de Anna, que ha perdido a su marido en un horrible accidente en carretera, y el conductor causante ni siquiera será castigado. Ahora  es un compañero  madrileño que quizá se nos hace mucho más cercano, aunque igual de cercanos tenemos que sentir a todos los demás. Javier era un usuario más de BiciMad, el sistema público de alquiler de bicicletas eléctricas de Madrid. El conductor que le atropelló se dio miserablemente a la fuga.

Se le pueden dar muchas vueltas y seguramente es lo que muchos hacemos hoy. Pero desgraciadamente ya nada se puede hacer, salvo castigar al culpable si es que se le encuentra. Bueno, no, también se pueden mejorar muchas cosas en nuestra ciudad. Muchas actitudes, mucha educación de los conductores de todo tipo de vehículos, mucha infraestructura, que no tienen porqué ser carriles bici, sino que puede ser más iluminación, más seguridad. Como esas cámaras de la estación de alquiler que no funcionaban. No sirve de nada lamentarse, ni sirve buscar porqués. Quizá sólo sirve recordar a nuestro compañero, mandar todo nuestro cariño a esa familia, y pedir a nuestro Ayuntamiento que tome medidas que hagan de nuestra ciudad un modelo de convivencia viaria, de calidad del aire y de sostenibilidad. Una ciudad segura para ser vivida.


Vía eldeladahon.net



jueves, 3 de marzo de 2016

Ciclismo urbano: pros y contras de usar el casco

Hola amigos! Hoy me gustaría poner sobre la mesa el uso del casco ciclista en ciudad, porque sabemos que en carretera es obligatorio (y muy recomendable). Entre los ciclistas urbanos hay una gran división de opiniones sobre si se debe o no usar casco en vías urbanas. También hay una oposición bastante fuerte a que sea obligatorio por normativa. A mi me recuerda todo esto a cuando hace 30 años los motoristas no querían llevar casco, pero entiendo que las velocidades alcanzadas por cada tipo de vehículo no son asimilables, que en general es totalmente comprensible que la gente prefiere tener la libertad de decidir. Yo no quiero decir que sea mejor una cosa ni otra, ya que cada caso personal es un mundo. Sólo diré que yo siempre uso casco, incluso para salir a dar una vuelta por el parque y por supuesto cuando circulo por las calles de mi ciudad. Y le pongo casco a mi hijo, que a sus cuatro añitos ya va por el tercero :-)

Directo a la wishlist XD Vía el blog Ohmybike


Soy plenamente consciente de que el casco no me va a proteger de casi nada si un coche me arrolla o si tengo un accidente mínimamente grave. El casco protege la cabeza y su contenido hasta un cierto punto, pero no la médula espinal ni los órganos internos contenidos en el tórax y el abdomen de ser aplastados, ni protege mis venas y arterias de sufrir una sección fatal, o mis huesos largos de romperse. Creo que parte de la clave de ir en bicicleta por la ciudad de forma responsable está en ser consciente de la fragilidad del cuerpo humano y de la velocidad a la que circulan tanto nuestra bicicleta como el resto de vehículos, que por cierto pesan cientos de kilogramos y alcanzan velocidades muy respetables en poblado, pese a la prohibición de superar los 50 km/hora... En el caso de los ciclistas no hay ninguna estructura protegiendo nuestro cuerpo de salir despedido varios metros, o de ser aplastado. Incluso nuestra bici puede herirnos en un impacto. Creo firmemente que una conducción responsable y respetuosa de las normas, aumentar nuestra visibilidad y elegir de forma consciente nuestras rutas por ciudad hacen mucho más por nuestra seguridad que un casco. Y aún así lo sigo llevando cada día que cojo la bicicleta. 

En fin, aparte de esta reflexión no apta para hipocondríacos, y dejando de lado el debate sobre la obligatoriedad normativa, está claro que el casco tiene pros y contras muy obvios, que pueden inclinar la balanza hacia usarlo o pasar de el. Para que no se diga que soy demasiado partidista, he dejado los contras para el final XD. No, en serio, opino que hay una solución fácil para casi todos los "contras" :-)

PROS

- Te protege (un poco)
- Es un buen ejemplo para los niños, que aún no entienden todas las implicaciones de usarlo o no.
- En caso de colisión y accidente, tu seguro y el seguro del otro vehículo/peatón buscarán cualquier resquicio para culparte a tí, el temerario ciclista. Lo hemos visto en un montón de casos. Llevar todo lo exigido por la normativa (luces, catadióptricos) y más (casco, reflectantes, incluso chaleco) pueden ayudarte a ganar la batalla de las apariencias.
- Protege a tus hijos y familiares menores de edad de traumatismos leves y medios. A nadie le gusta ir corriendo a urgencias con un crío sangrando profusamente por una brecha (sin importancia) en la cabeza. Lo digo por experiencia. Además son hereditarios.
- Tener que cargar con el casco cuando aparcas la bici no es tan malo. Puede incluso dar lugar a alguna conversación interesante. Te define como ciclista ante los no ciclistas, más allá de unos zapatos o un reloj caro. Además, sabías que hay cascos plegables, ¿no?
- Te protege de los elementos: viento, radiación solar, frío, lluvia y nieve. Incluso del sol, el viento, el polen y los bichos en los ojos si eliges el casco adecuado. Los hay con visera, gafas incorporadas, orejeras, tejido impermeable... qué más quieres?
- El casco puede formar parte de tu estilo. Los hay realmente bonitos y puedes usarlos como un complemento más. Si amas los sombreros, te acaban gustando los cascos...
- El casco es el soporte ideal para otros accesorios: retrovisores especiales, luces intermitentes, reflectantes, o tu vídeocámara para grabar la gran ciudad. Se te ocurre un sitio mejor donde poner todo esto de forma realmente útil?

CONTRAS

- Es el enemigo del cabello recién lavado, o de cualquier tipo de peinado exigente. Te deja el cabello hecho un desastre, aplasta rizos, deja marcas raras...
- Te deja marcas en la frente, te puede arruinar el maquillaje o producir acné.
- Los cascos más accesibles son demasiado deportivos, mientras que los cascos más urbanos, con un estilo más neutro, suelen ser carísimos.
- Es un fastidio cargar con el casco a todas partes, como si no lleváramos suficientes cosas entre bolso, portátil, carpetas, bolsa de la comida... no necesito otro bulto más.
- Es un gasto absurdo comprar casco a los niños, se les queda pequeño continuamente y lo dejan nuevo.
- En general, llevar casco es un agobio, te hace sudar más en la cabeza y cuero cabelludo y le resta al montar en bici parte de esa sensación de libertad que tanto te gusta.

Se os ocurren más pros y contras? Cuáles son vuestros principales motivos para usar o no usar el casco en ciudad?

Espero que os haga gustado la entrada de hoy. Saludos!!